domingo, 7 de agosto de 2011

Sí, soy masoquista.

" Estoy al borde del amor, justo a un paso de la perdición. Escribo para descansar mi mente, porque es mi vicio, me encanta hacer poesía de él. Porque yo me convertí en literatura luego de perder frente a una pequeña cosa sin nombre o valor. El amor se esconde cuando la indiferencia se presenta, porque es cobarde, pero masoquista. Con él aprendí que puedo disfrutar de los domingos y de los juegos sin sentido. A rodar por la vida, contando algunas historias, contando algunas mentiras. Es una droga, es un toxico. De mi, es su boca. Y continuas dándoles golpes a este ser masoquista oportunista, que te toca el corazón casi siempre sin querer.

Colapso con solo recordar, nadie me había hecho sentir tan importante antes, y nunca me había despertado con una razón más para hacer algo en el día, algo más que continuar respirando. Y está a kilómetros, a cientos de calles, tiendas y personas que interrumpen nuestro amor, pero estamos juntos, no solo somos él y yo, somos nosotros. Quizás estas no sean las palabras adecuadas, o quizás esto no sea suficiente, pero es real, es explicar como lo Amo."