Quizá y no lo sepa todo, y mañana me vaya a equivocar al responder mi examen. Quizá y alguien tenga los mismos errores, más o menos. Quizá y conteste la mayoría bien. No lo sé, no tengo idea y realmente no me preocupa. Porque ese examen no mide mi capacidad intelectual, ni mi fuerza, ni mis ganas, ni siquiera mi vocación. Ese maldito examen no me dice qué tan capaz soy de sacar adelante mi futuro, de qué tanto voy a dar de mí para lograr algo, qué tanta es mi necesidad por aprender, cuántas son mis ganas de aferrarme a la medicina. Ese examen no me califica como persona, no dice cómo ni porqué. Y eso, eso es lo más difícil. No es química, ni matemáticas y mucho menos inglés, es el hecho de que no dice nada de mí, solo dice que no tengo "ayuda" para entrar, conocidos que me metan, dinero para pagar. Ese examen es lo único que dice de mí. Y quizá esté perdiendo mi tiempo. Quizá y no apruebe y tenga que esperar seis meses más, quizá y tenga qué intentarlo dos veces más y no me importa. Porque prefiero perder un año en intentos fallidos que 5 estudiando una carrera que no voy a ejercer, o despertar un día siendo algo que no me llena como ser humano. Estar entre gente tan ajena, tan llena de desgana por trabajar en algo que no le gusta. Llámenme testaruda si quieren, pero yo soy una persona con las metas claras y las ganas intactas, con la certeza bien puesta y con la mirada fija en un futuro; y en ese futuro estás tú: medicina.
Suerte, es lo único que necesito para mi examen de mañana.